Hipócrates...

"Que tu alimento sea tu medicina y tu medicina sea tu alimento."

sábado, 30 de enero de 2010

El propósito de Dios sobre la alimentación


Una escritora cristiana y profeta de Dios llamada Ellen G. White escribió lo siguiente con respecto a qué deberíamos consumir los seres humanos para estar sanos y fuertes. Es el mismo plan original que dio Dios desde el mismo principio de la raza humana.


CONSEJOS SOBRE EL RÉGIMEN ALIMENTICIO pág. 95 Los cereales, las frutas carnosas, los frutos oleaginosos, las legumbres y las hortalizas constituyen el alimento escogido para nosotros por el Creador. Preparados del modo más sencillo y natural posible, son los comestibles más sanos y nutritivos. Comunican una fuerza, una resistencia y un vigor intelectual que no pueden obtenerse de un régimen alimenticio más complejo y estimulante.


CONSEJOS SOBRE EL RÉGIMEN ALIMENTICIO pág. 319 Dios está obrando en favor de su pueblo. No desea que esté sin recursos. Lo está haciendo volver al régimen alimenticio originalmente dado al hombre. Este régimen debe consistir en alimentos hechos con las materias primas que él proveyó, que son principalmente las frutas, los cereales y las oleaginosas, aunque también se usarán diversos tubérculos.


CONDUCCIÓN DEL NIÑO pág. 360 Vez tras vez se me ha mostrado que Dios está llevando a su pueblo de vuelta a su propósito original, esto es no subsistir de la carne de animales muertos. El desea que enseñemos a la gente un camino mejor. . . . Si se elimina la carne, si el gusto no se educa en ese sentido, si se fomenta el deseo de frutas y cereales, pronto será como Dios lo dispuso en el principio. Su pueblo no consumirá carne.


CONSEJOS SOBRE EL RÉGIMEN ALIMENTICIO pág. 366 Un régimen alimenticio sencillo pero abundante y variado de frutas es la mejor alimentación que puede colocarse ante los que se preparan para la obra de Dios.


CONSEJOS SOBRE EL RÉGIMEN ALIMENTICIO pág. 372 Los cereales y las frutas preparados sin grasa, y en una condición tan natural como sea posible, deben ser el alimento para las mesas de todos los que pretenden estar preparándose para la traslación al cielo.


CONSEJOS SOBRE EL RÉGIMEN ALIMENTICIO pág. 371 Es un error suponer que la fuerza muscular depende de consumir alimento animal, pues sin él las necesidades del organismo pueden satisfacerse mejor y es posible gozar de salud más robusta. Los cereales, las frutas, las oleaginosas y las verduras contienen todas las propiedades nutritivas para producir buena sangre.


CONSEJOS SOBRE EL RÉGIMEN ALIMENTICIO pág. 484 No prescribimos un régimen definido, pero decimos que en los países donde abundan las frutas, los cereales y las nueces, la carne no es el alimento adecuado para el pueblo de Dios. Se me ha indicado que la carne propende a animalizar la naturaleza, a despojar a los hombres y mujeres del amor y la simpatía que debieran sentir por cada cual, y hace predominar las pasiones bajas sobre las facultades más elevadas del ser. Si el comer carne fue alguna vez saludable, no lo es ahora. Los cánceres y tumores y las enfermedades pulmonares se deben mayormente a la costumbre de comer carne.


Las mismas Escrituras revelan que no es bueno el consumo de carne, y que debemos ser sabios en qué elegimos como alimento para meterlo en nuestro cuerpo:


Proverbios 23:19-21 Oye, hijo mío, y sé sabio,

Y endereza tu corazón al camino.

No estés con los bebedores de vino,

Ni con los comedores de carne;

Porque el bebedor y el comilón empobrecerán,

Y el sueño hará vestir vestidos rotos.


Dios no quiere nuestra ruina, sino que también se preocupa por nuestra salud física, así como la salud espiritual:


3ª Juan 1:2 Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma.


Debemos cuidar nuestro cuerpo, porque nuestro cuerpo es de Dios, ya que Dios mismo mora dentro de nosotros si lo permitimos. Como Dios es santo, no puede habitar en un cuerpo corrupto y sin santidad; ya que todo aquel que destruye el templo de Dios (su propio cuerpo) Dios destruirá a la tal persona según lo dice 1ª Corintios 6:19,20 y 1ª Corintios 3:16,17.


Espero que escojas lo más apropiado para tu organismo, y así glorifiques a Dios en el cuerpo que Él te dio para que lo cuides.

2 comentarios:

  1. excelentes citas le felicito, he comprobado en mi salud, durante muchos años, que llevar una vida temperante y alimentandose como Dios manda y su Sierva aconseja, es una sabia decisión para gozar de buena salud, Dios le bendiga y gracias por tan bonito blog.

    ResponderEliminar
  2. Mil Gracias, que contenido tan apropiado para entender que Dios no es solo orar y pedir, sino que Dios piensa en todo, por ejemplo, la comida, es que El es Mi Papi, que me cuida y me mima. Dios te bendiga. PILAR D.

    ResponderEliminar